Una de las situaciones que más me impactó en Riberalta fue ver a niñas con bebés en sus brazos. Muchas veces pensé que eran niñas cuidando de sus pequeños hermanitos, pero verlas amamantar cambió esa percepción: eran sus hijos.

El embarazo adolescente en Bolivia es alto. De acuerdo con los estudios más recientes, un 18% de las adolescentes (15 a 19 años) del país están embarazadas o han sido madres. Eso es una tasa de 88 nacimientos en jóvenes por cada mil mujeres.

Sin embargo, en el departamento del Beni existe otra preocupante realidad que tiene relación con el embarazo precoz adolescente, es decir, niñas de entre 11 a 14 años que se convierten en madres.

¿Por qué sucede esto? ¿Tendrán acceso a métodos anticonceptivos? ¿Será un problema cultural? ¿Qué riesgos hay para estas niñas que se convierten en madres?

Uno de mis trabajos en Bolivia Sostenible fue intentar dar respuesta a todas estas interrogante. Fue así cómo conocí a la doctora María Dolores Aguirre, ginecóloga obstetra del Hospital Materno Infantil en “Reidum Roine” en Riberalta.

Riesgos

Gran parte de las niñas con embarazos precoces llegan a los consultorios con embarazos casi a término, de unos 7 a 8 meses, acompañadas de un familiar y diciendo desconocer que están esperando un bebé.

Son madres que no se han controlado en todo el proceso de gestación, lo que puede implicar un gran riesgo tanto para ellas como para el bebé.

Entre las complicaciones que nombró la doctora, figuran la preclamsia y/o anemia severa, desnutrición para la madre y el bebé, además de tener un parto prematuro. Muchas tampoco no saben realmente cómo amamantar y terminan con bebés desnutridos.

Factores

De acuerdo con el contexto de Riberalta, la doctora descartó que esto sea a raíz de un problema cultural, pues la realidad del embarazo precoz es un problema relativamente nuevo que comenzó a visualizarse hace unos 15 años.

El problema radica principalmente en un factor económico que tienen que ver con la familia riberalteña. “Muchas madres salen muy temprano a trabajar a quebrar almendras y dejan a las hermanas mayores a cargo de sus hermanitos. Entonces ellas se sienten mujeres capaces de cumplir con responsabilidades y, por ende, poder hacerse cargo de su propio hijo”. Además, muchas de ellas dejan la escuela a temprana edad para trabajar en el hogar o ayudar a sus familias.

Anticoncepción

En Bolivia existe el seguro básico en donde todos los anticonceptivos son gratuitos. Desde condones hasta pastillas, implantes, inyecciones e implantes como la T de cobre. El único procedimiento que deben hacer las interesadas es inscribirse en el seguro.

Al ser menores de edad necesitan la autorización de un adulto, que no necesariamente debe ser de sus padres, sino algún familiar o incluso primas. En el mismo recinto médico estas jóvenes pueden recibir ayudar y guía de una sicóloga.

“La falta de información es un grave problema en nuestra comunidad. Muchas mujeres no saben que pueden acceder a este método de manera gratuita en el sistema”, dijo la doctora.

Como parte del trabajo también acudí a la radio Amazonía para entregar esta información a la comunidad. Los medios de comunicación son una fuente poderosa si son usados correctamente para orientar a la audiencia en temas tan importantes como el embarazo precoz adolescente.

Fernanda Carrera Pérez